2 de diciembre de 2010

Un mensaje al VI Encuentro Cívico Iberoamericano

En Mar del Plata, con motivo del VI Encuentro Cívico Iberoamericano, Juani y Samantha, de Jóvenes Solidarios de esa ciudad, integrantes del proceso nacional de Argentina, leyeron la carta dirigida a los participantes del mismo:


"Las y los jóvenes de la Escuela Latinoamericana para la Actoría Social Juvenil, reunidos Mar del Plata, en nuestro Módulo Nacional de formación, inspirados en el Proceso de Cambio que está liderado hoy por el movimiento indígena, originario y campesino y que promueve la justicia social y el “vivir bien” queremos hacerle llegar nuestro mensaje al VIº Encuentro Cívico Iberoamericano :

La carrera por el Desarrollo propuesta desde el norte ha consolidado un mundo basado en la inequidad.

Muchos de los que hoy ostentan el poder -adultos y jóvenes de espíritus viejos- nos creen criminales potenciales y miembros activos del crimen organizado, nos ven pobres por no consumir lo que producen... sin embargo se enriquecen con nuestro trabajo. Nos miran violentos, adictos, alcohólicos, pero son sus armas y drogas en las calles, sus mensajes en los medios de comunicación, su liderazgo en el crimen organizado y su forma violenta y autoritaria de solucionar los conflictos internos y externos, los que provocan el malestar, inconformismo y decepción de la sociedad.

La monocultura, la globalización y la tendencia unilateral del concebir al mundo, que nos bombardean diariamente, nos hacen renegar de nuestra identidad y nuestros orígenes, sin embargo nuestra identidad es diversa, y se constituye en nuestra mayor riqueza, pues cada pueblo, cada nación y cada tribu, nuestros ancestros, han dejado huellas profundas en nuestras historias y han fortalecido nuestra identidad de latinoamericanos.

Hoy los participantes de la ELASJ nos identificamos con los jóvenes excluidos de las escuelas, las universidades, las calles; con los trabajadores informales e ilegales, con los que sufren la explotación laboral, sexual y el abuso psicológico, físico y moral, con los que tienen más reconocimiento y empleo por parte de los grupos criminales, que de las instancias gubernamentales y de las empresas privadas, somos solidarios con las juventudes que participan con entusiasmo de los procesos electorales, y sin embargo son excluidos e ignorados en la toma de decisiones en todo nivel, considerados simples objetos.

Las y los jóvenes somos innovadores, emprendedores, creativos, alegres, solidarios, recíprocos, comunitarios, educadores, soñadores, actuamos para cumplir nuestros sueños, comprometidos, apasionados, enamorados de la vida en todas sus expresiones y cuidadores de la Pachamama – la madre tierra; somos sujetos activos del cambio, somos sujetos de derechos. Somos el presente de América Latina, no sólo porque somos la mayoría de la población, sino porque somos promotores de conciencia, cuestionadores de la realidad, no creemos en el sistema capitalista neoliberal, y aunque hemos vivido y vivimos la crisis, afrontamos la adversidad, el conformismo y la exclusión, con espíritus alegres, llenos de energía y esperanza constituyéndonos en el motor del cambio en nuestras vidas, nuestros hogares, nuestras comunidades, nuestros pueblos y nuestras naciones.

El viejo liderazgo individual vertical y autoritario que implementa el actual modelo social, económico, político y cultural ha generado la peor crisis en el mundo, por esto estamos convencidos que esta realidad que nos toca vivir día a día la transformamos a través del liderazgo comunitario, con pilares basados en un carácter rotativo, coherente entre el pensar, el sentir y el hacer; complementario y equitativo entre los géneros, entre culturas y las edades; participativo en la toma de decisiones, recíproco en las acciones, responsable ante las decisiones y comprometido con las causas de los pueblos.

Estamos concientes de que la transformación de nuestras vidas atraviesa la transformación de las realidades de nuestros pueblos y nuestros países, la pasividad de los adultos no la compartimos, porque no somos simples espectadores, somos actores sociales, idealizamos y actuamos, no sólo criticamos somos constructores críticos, hacemos e incidimos en las decisiones y acciones de muchos otros, estamos concientes de nuestro papel en la historia, somos parte de ella y la modificamos por las nuevas generaciones, es nuestra apuesta y la hacemos con pasión porque ellas y ellos los más pequeños se lo merecen.

Cada uno de nuestros países atraviesa diferentes procesos de cambio, algunos más adelantados que otros, sin embargo es claro el horizonte trazado: el Vivir Bien. Los participantes de la ELASJ estamos comprometidos a emprender todas las acciones, tomar decisiones y proyectar nuestras vidas hacia ese horizonte, que aunque no lo veamos realizado inmediatamente, pretendemos dejar parte del camino avanzado y muchas semillas regadas.

Por eso nosotros asumimos el compromiso de acompañar los procesos de cambio en los ámbitos educativos, sociales culturales y ambientales de nuestros pueblos y los animamos a ustedes a profundizar el compromiso por la construcción de esta gran utopía latinoamericana desde cada una de sus redes y organizaciones.

Jallala América Latina!
Mar del Plata, 19 de diciembre de 2010"